¿Logrará Foodtopía mantenerse a flote tras la pandemía?
En 2015, Jesús Pagán, decidió fundar Foodtopía, un proyecto basado en la combinación de la tecnología alimentaria, el compromiso social para contribuir a la conservación del planeta y suministrar platos de comida a precios económicos.
Bajo un novedoso sistema de cocción, basado en la tecnología de procesos termodinámicos, la empresa logra platos de cuchara sin florituras, a un bajo coste y con un mínimo consumo de energía.
Ahora mismo, de los 14 establecimientos con los que contaba la cadena, quedan dos en activo, de las cuales se encargan ellas mismas de la cocina. La llegada de la pandemia, obligo el cierre de la hostelería y muchas de las tiendas que ofrecían el servicio. Asimismo, obligo al cierre de la cocina central. Tras la vuelta a la “normalidad”, algunas tiendas no volvieron a abrir y las que lo hicieron, fue bajo otra marca.
Pagán, cree que "tal vez no era el momento o tal vez la sociedad no estaba lo suficientemente comprometida, intentamos seguir e introdujimos nuevos productos canelones, lasaña y otras finuras. Nos pervertimos un poco". También, justifica con cierta ironía que “nuestro mundo no es un mundo multiplato, es un mundo donde tendremos que garantizar un plato diario a 8.000 millones de personas".
Cuando todo iba bien, la empresa llegó a servir más de 20.000 raciones diarias, producidos sin carne ni productos artificiales, con consumos de energía mínimos y con un precio social. Los precios rondaban entre 1 y 2,5 euros; tal y como afirma Pagán "nuestras lentejas no serían como las de las abuelas, pero costaba un euro la ración y eran muy sanas"
Para reinventarse, tras el golpe de la pandemia, la empresa ha desarrollado un nuevo modelo denominados Termopol 50 y Termopol 25, unidades más pequeñas cocinadas bajo el mismo principio. "Son unidades de transformación local, con un bajísimo consumo energético y aisladas térmicamente; en la transformación de los alimentos está ausente tanto la energía fósil, como envases de cualquier tipo que no sean reutilizables". El proyecto no ha hecho nada más que empezar. Esta unidad operativa se está desarrollando en una localidad de Valencia y se están obteniendo buenos resultados.