El Plan Industrial que el Gobierno regional está ultimando incorporará un nuevo objetivo para ayudar al sector a afrontar los retos de la Industria 4.0, especialmente en dos frentes que ya marcan la competitividad de cualquier fábrica, planta o empresa tecnológica: el despliegue de la inteligencia artificial y el refuerzo de la ciberseguridad.
Así lo trasladó el consejero Juan María Vázquez durante la reunión del Consejo Asesor Regional de Industria (CARI), en la que participaron alrededor de una treintena de representantes del sector industrial de la Región. Según explicó, esta “última revolución industrial” exige dotar al tejido productivo de herramientas para operar con mayor seguridad en un entorno plenamente digital y, al mismo tiempo, incorporar a los procesos productivos el impulso que vive la inteligencia artificial.
La nueva línea de trabajo se integrará bajo el concepto “Más Conectada”, que pasará a ser el séptimo eje del plan. El consejero enmarcó esta incorporación en el proceso participativo desarrollado para la elaboración del documento, con más de 80 encuentros con actores del sector, y defendió que sumar esta línea refuerza el carácter dinámico del Plan Industrial y su capacidad de adaptarse a nuevos desafíos.
Además, el plan incluirá un sistema de seguimiento con una decena de indicadores estratégicos, medibles y accesibles, para evaluar la evolución real de las medidas y ajustar objetivos cuando sea necesario. Entre las métricas previstas figuran el Valor Añadido Bruto industrial, el Índice de Producción Industrial y la inversión en I+D+i, junto a otros indicadores como la ocupación en el sector, el número de empresas innovadoras, el volumen de exportación industrial, la superficie de suelo creado para industria, los certificados de ahorro energético, la potencia instalada de autoconsumo y el tráfico de mercancías generado.
El propio CARI actuará como comité de seguimiento del plan, que contempla una revisión intermedia en 2030. En paralelo, el órgano asesor ampliará su representación con nuevas incorporaciones del ámbito económico, universitario y estratégico, y también con perfiles de la Administración regional ligados a Formación Profesional, el Instituto de Fomento y Hacienda, con el objetivo de mejorar la coordinación entre políticas de formación, empleo e industria.
En la reunión, el consejero informó asimismo de nuevas ayudas autonómicas para pymes por 14,3 millones de euros con fondos europeos FEDER, destinadas a impulsar actuaciones de eficiencia energética y la instalación de paneles solares fotovoltaicos para autoconsumo, con vigencia hasta 2027. El planteamiento, señaló, busca reducir trámites y acortar plazos mediante un procedimiento más ágil y telemático.
El encuentro también sirvió para presentar los resultados del estudio encargado a la Universidad de Murcia sobre la percepción social de la industria en la Región. El documento recoge un respaldo mayoritario al fortalecimiento del tejido industrial y a la necesidad de una política industrial sostenida, con foco en el empleo de calidad, la sostenibilidad y la innovación, un enfoque que el Ejecutivo regional sitúa en el centro del Plan Industrial en elaboración.